¿Cómo contabilizar el Impuesto de Sociedades?

La contabilidad del Impuesto de Sociedades puede ser todo un desafío. Tendrás que ser un as de lo que se conoce como asientos contables, unas anotaciones que registran los ingresos y gastos de las empresas. Si quieres evitar sorpresas en la declaración te explicamos las claves para crear asientos contables y poder contabilizar el Impuesto de Sociedades.

¿Qué es el Impuesto de Sociedades?

El Impuesto de Sociedades es el que se aplica a los beneficios que generan las empresas. La dinámica es sencilla, si tu negocio obtiene rendimientos tienes que declarar y pagar impuestos por ellos. 

En general, el tipo impositivo que pagan las entidades en el Impuesto de Sociedades es del 25%. Pero existen tipos reducidos que se aplican a pequeñas empresas o de nueva creación.

Para informar a Hacienda de lo que ha ingresado tu empresa tendrás que rellenar el modelo 200. Es un formulario que la gran mayoría de sociedades tienen la obligación de presentar al cierre de cada ejercicio fiscal.

Contabilidad de empresa: asientos contables

Para contabilizar los gastos e ingresos de una empresa tienes que crear un asiento contable. Básicamente es una anotación en el libro de contabilidad para registrar una entrada o salida, es decir, refleja los gastos y los ingresos. 

Para empezar, el sistema de contabilidad es de partida doble ¿Esto qué significa? Que cada asiento contable se refleja en la contabilidad de la empresa a través de dos anotaciones: 

1. Debe: se anotan operaciones que corresponden con las entradas de activos y gastos como los aumentos de inversiones. 
2. Haber: corresponde a operaciones que generan pasivos. Es donde se anotan los préstamos o créditos.

Al realizar un asiento contable tendrás que añadir más datos sobre el movimiento que quieras anotar, como la fecha o las cuentas en las que se realiza la operación.

Todos los asientos contables se registran en los libros contables de la empresa. Gracias a estos libros se pone orden la información de cada transacción con el fin de hacer un buen seguimiento del negocio.

Para facilitar la organización de los movimientos financieros se utilizan cuentas contables. Estas agrupan todas las transacciones en categorías específicas. Algunas de las más comunes son las cuentas activo, que reflejan los bienes y recursos de la empresa o, las cuentas pasivo, que recogen deudas y obligaciones. De esta forma se puede hacer una gestión financiera más clara y eficiente.

Cuentas contables del Impuesto de Sociedades

Las cuentas contables relacionadas con el Impuesto de Sociedades están vinculadas a obligaciones con la Agencia Tributaria. Veamos las principales:

4752. Hacienda Pública, acreedora por impuesto sobre sociedades

Tal y como su nombre indica, esta cuenta se utiliza para registrar los pagos que debe hacer la empresa por el Impuesto de Sociedades. Indica la deuda pendiente de la compañía con Hacienda. 

6300. Impuestos sobre beneficios corrientes

Recoge el gasto contable que supone el impuesto de sociedades. Esta cuenta refleja el gasto que le supone a la empresa pagar el impuesto. Su contrapartida suele ser la cuenta 4752. Hacienda Pública acreedora por impuesto sobre sociedades. 

Además, existe la subcuenta 6301. Contabiliza las diferencias temporarias que puedan surgir en el ejercicio y que generarán créditos o pasivos en futuros ejercicios. 

4709. Hacienda Pública, Deudora por devolución de impuestos

Refleja la cantidad que Hacienda te tiene que devolver cuando has pagado más impuestos de los que te tocaban. Se incluyen las devoluciones derivadas por excesos en pagos, rectificaciones de autoliquidaciones o cualquier situación en la que tengas derecho a un reembolso fiscal.

473. Hacienda Pública, retenciones y pagos a cuenta

Aquí entra en juego el modelo 202, el formulario con el que se hacen pagos anticipados del Impuesto de Sociedades. Se realizan 3 pagos a lo largo del año y se contabilizan en esta cuenta contable. 

479. Pasivos por diferencias temporarias imponibles

Registra cantidades que aún no se han abonado pero que se tendrán que pagar en el futuro. 

474. Activos por impuesto diferido

Refleja el importe del crédito a favor que tiene la empresa que le hará pagar menos impuestos en un futuro.

Ejemplo de asientos contables

Pongamos que llega el momento de presentar el modelo 200. Toca hacer la contabilidad y saber si el Impuesto de Sociedades te sale a pagar o a devolver.

Veamos diferentes ejemplos de asientos contables:

Imagina que tu empresa tuvo que pagar 15.000€ en concepto de Impuesto de Sociedades el año pasado. Sin embargo, ya pagó 8.000€ en anticipos a través del modelo 202. Por ello, el asiento contable de esa deuda con la Agencia Tributaria quedaría tal que así:

Ahora supongamos que cuentas con una diferencia temporaria de 400€ por la amortización de nueva maquinaria. El asiento contable sería el siguiente:

Por otro lado, este año has pagado 3.500€ pero el resultado final del Impuesto de Sociedades te ha salido a devolver una cantidad de 500€. Yujuu. El asiento contable sería el siguiente: