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Bienvenido, bienvenida, persona física. Ah espera, que aún no te habíamos contado qué es una persona física. Bueno, pues ya lo sabes. Tú. Yo. Nosotros. Todos. Somos personas físicas. Es decir, todos los individuos que tienen derechos y obligaciones en la sociedad desde su nacimiento, solo por el hecho de ser personas. Todas las personas físicas tienen derecho a un nombre, domicilio, patrimonio, estado civil y nacionalidad. Así que un ejemplo de persona física es cualquier individuo particular. Tu prima Clara, tu vecino Víctor o tu tía Antonia.
Como te habíamos dicho, todas las personas tienen derechos, pero también obligaciones. Una de las más importantes es la de cotizar por los ingresos y riquezas que generas. Al impuesto que grava (que recauda impuestos) sobre las rentas de las personas físicas se le llama justamente así, impuesto sobre la renta de las personas físicas. El IRPF de toda la vida.
La forma de identificar a cada persona física es a través de su documento de identidad, el DNI. Pero para los trámites online, ¿cómo se puede hacer? Si te gusta mucho nuestra gestoría fiscal y decides hacer la declaración de la renta online con nosotros, ¿cómo se autorizan los trámites? Pues la forma más sencilla de hacerlo es con el certificado de persona física digital. El FNMT de persona física, como a veces se le llama. O certificado digital a secas, que quizá te suena más. Es un documento electrónico expedido por la FNMT-RCM (Fábrica Nacional de Moneda y Timbre-Real Casa de la Moneda) que vincula al titular (a la persona física) con una firma digital, para confirmar su identidad. Puedes solicitar el certificado digital de persona física en este link, o si prefieres tenemos una guía más completa sobre ese tema: solicitar el certificado digital de la FNMT.
Una de las mayores confusiones suele venir a la hora de diferenciar entre persona física y jurídica. Las personas jurídicas también son individuos con derechos y obligaciones, pero que no cuentan como personas individuales, sino como instituciones. La persona jurídica y la persona física se diferencian en que la jurídica es la unión de una o más personas bajo una entidad para cumplir un objetivo económico o social. Por ejemplo, es el caso de las sociedades mercantiles, las cooperativas… Las empresas, vamos. Esto significa que, si eres autónomo y no una empresa, sigues siendo considerado únicamente persona física y no jurídica. ¿Claro, no?
Igualmente, si quieres saber más sobre las personas jurídicas, en nuestro diccionario te contamos qué es una persona jurídica. ¡Ahí encontrarás más información!
Si eres una persona física (ahora que ya sabes lo que es) y te toca cumplir con la obligación del IRPF, que sepas que hay formas fáciles de presentar la declaración a Hacienda online. Te la hacen nuestros gestores para la declaración de la renta, que son expertos en el tema y además te dan asesoramiento fiscal personalizado para el IRPF y tooodos los impuestos de autónomos. ¡Decántate por nuestra gestoría virtual!
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