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No, no somos gallegos, pero el resultado de tu renta depende de varias cositas. Y como siempre, aquí está tu asesoría online de confianza para explicártelas al dedillo. ¿De qué factores puede depender el resultado 0 en la declaración de la renta, resultado a devolver o resultado a pagar?
Lo primero, primerísimo. Como es lógico, el resultado de tu declaración de la renta depende de la retención (lo que te quitan del sueldo) que te hayan practicado durante del año. Las retenciones son lo que vas pagando mensualmente de IRPF, ya sea a través del modelo 100 o de las facturas si eres autónomo o de lo que te va reteniendo la empresa (la diferencia entre sueldo bruto y neto) si eres empleado de una empresa.
Esto es lógico. La declaración de la renta no es más que un cálculo de los impuestos que te corresponde pagar por tus ingresos, y si durante el año has cotizado más que esta cifra, dará una renta negativa (te devuelven dinero) y si has cotizado menos, tendrás que pagar tu (renta positiva).
¿Necesitas empezar desde antes? Puedes leer nuestro blog sobre cómo funciona la retención de IRPF en la nómina o IRPF de autónomos: qué es, cómo funciona y más.
Sin embargo, es difícil solo con esto saber el resultado de tu declaración de la renta ya que depende de más cosas.
Segundo factor que modifica el resultado de tu declaración: los mínimos personales y familiares. Es básicamente decir que tu situación (tanto propia como familiar) hace variar el resultado de tu renta. Esto es porque Hacienda entiende que, dependiendo de si tienes hijos, mayores a cargo y demás, deberías pagar más o menos impuestos. Por ejemplo, si tienes hijos a cargo se te resta el mínimo por descendiente, si tienes alguna discapacidad el mínimo por discapacidad… Es decir, que no todas las personas pagan los mismos impuestos aunque cobren lo mismo, porque las circunstancias personales de cada uno importan.
¿Qué te creías? ¿Que una asesoría de la declaración de la renta no iba a tener un artículo contándote tooodo sobre los mínimos de la renta? Nos infravaloras 👉 Mínimo personal y familiar: qué es y cuáles existen.
Ya te lo está adelantando el título, las deducciones son otro factor que influye en el resultado de tu declaración de la renta. Hay deducciones estatales, comunes en todos los territorios, como la deducción por madre trabajadora, por invertir en planes de pensiones o por donativos. Pero además, cada autonomía tiene sus propias deducciones y pueden hacer que unas tengan un resultado menor en la renta que otras. Por ejemplo, un habitante de la Comunidad Valenciana tiene casi cuarenta tipos de deducciones mientras que en la Comunidad de Madrid hay doce.
Aparte de lo que hemos hablado ahora, que es lo normal, hay años en los que la declaración se te puede complicar más de la cuenta por situaciones excepcionales que han ocurrido. Estamos hablando de recibir una herencia, tener una segunda vivienda o cosas así. Vamos a ver los ejemplos más en detalle.
Las herencias y el IRPF, en principio, no tienen nada que ver. Cuando recibes una herencia, lo que se paga es el Impuesto de Sucesiones y Donaciones, y no sería necesario declararlo en la renta. Sin embargo, suele ser rara la vez que esa herencia no genere ingresos. En caso de obtener una ganancia (si vendes lo heredado) o unos rendimientos (si son unas acciones que dan dividendos o un piso alquilado por el que cada mes cobras un tanto) es cuando se tienen que incluir en la declaración de la renta. O sea, que lo que incluyes no es la herencia en sí, sinó lo que ganas con esa herencia.
Las excepciones a esto son heredar una vivienda o un plan de pensiones. En ambos casos es obligatorio incluirlo en la declaración de la renta de ese año.
¿De qué más puede depender el resultado de la renta? Pues no del hecho de tener una segunda vivienda, si no del uso que le das. Hay dos opciones si tienes una segunda residencia: o está alquilada y genera rendimientos o está vacía porque vas menos de 183 días al año y por eso no es considerada vivienda habitual. Y estas dos opciones hacen que el resultado de tu renta cambie.
Si la vivienda está alquilada, tendrás que incluir lo que ganas con el alquiler en la base general (y pagar impuestos por ellas). Sin embargo, si la casa está sin alquilar, tienes que pagar unos impuestos de entre el 1,1% y el 2% (según el valor catastral del inmueble), aunque esta no esté generando ningún ingreso.
¿Quieres que el resultado de tu declaración sea a devolver? Quizá necesites asesoramiento fiscal personalizado para declarar esa herencia complicada. O simplemente quieres que alguien te quite el rollo de hacer la declaración de la renta online. Y todos los caminos llevan a TaxScouts. Porque tenemos un gestor experto en la declaración de la renta que puede ayudarte con lo que necesites. ¿Te echamos una manita?
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